Los lastres del PAN, Roberto Sosa la reelección para servir a los desarrolladores, por eso arrancó su campaña con una propuesta de continuidad: seguir sirviendo a los empresarios inmobiliarios.
La debacle que tiene Morena en Corregidora es claro que beneficia al PAN -por el momento- pero eso no significa que en este municipio las cosas vayan a mejorar de ganar el blanquiazul, sino por el contrario: es más de lo mismo con Roberto Sosa Pichardo.
En el Partido Acción Nacional tienen candidatos que sumando restan, algunos que buscan la reelección, hasta por tercera ocasión como Roberto Sosa Pichardo.
Pueden argumentar que va por la primera reelección, pero hay que recordar que desde hace 6 año viene lucrando con el erario municipal.
Sosa Pichardo era -es- de los presidentes municipales que más cobraba, no solo en Querétaro, sino en el país, arriba de los 100 mil pesos. Más que Pancho Domínguez y AMLO.
Busca la reelección, pero viene precedido de una fama de solo beneficiar a los desarrolladores de vivienda, con la aprobación inmoral de cambios de uso de suelo.
El más escandaloso fue el raro cambio de densidad de 10 hectáreas en el área protegida de El Batán.
Ahí el tema no fue el cambio de uso del suelo para uso habitacional, ese ya estaba para un Desarrollo Campestre con una densidad de 40 personas por hectárea desde 1991.
El meollo del asunto es que este Ayuntamiento del Municipio de Corregidora comandado en ese momento por Roberto Sosa Pichardo, autorizo cambiar esa densidad a 300 personas por hectárea.
Un cambio que afecta severamente al medio ambiente, que deja en claro quién manda en Corregidora, a quien sirve Roberto Sosa: a los empresarios inmobiliarios.
¿A cambio de qué Roberto Sosa y sus cómplices en el Ayuntamiento aprobaron ese cambio’?
En su momento se documentó que ese cambio de densidad traerá 75 viviendas con 4 habitantes cada una por hectárea, entonces serán 750 viviendas y 3,000 habitantes en ellas que requerirán servicios como red de agua potable, red de drenaje, alumbrado público, seguridad, que no correrán a cargo de los desarrolladores, sino del presupuesto municipal, de los impuestos de los ciudadanos.
El presidente municipal con licencia, Roberto Sosa se gasto una millonaria suma de recursos públicos para defender los indefendible, y quiso justificar ese cambio de densidad por el crecimiento poblacional del municipio: absurdo argumento.
Lo real es que el desarrollo urbano que impulsa Sosa Pichardo se traduce en dinero por moches para la aprobación de ese cambio.
Recursos que hacen posible su campaña electoral.
La verdad es que Roberto Sosa quiere la reelección para terminar de cumplirles a los desarrolladores, y proporcionar al desarrollo inmobiliario de El Batán servicios públicos a cuenta de todos los ciudadanos, como red de agua potable, red de drenaje, alumbrado público, seguridad.
Para eso quiere la reelección, y para ello manipulara sus programas sociales, principalmente manipulara a los comités de colonos de los condominios, de ello le platicaremos en otra entrega.
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